El clero diocesano de Salamanca se reunió en la tarde de ayer, domingo 13 de noviembre frente a la puerta de San Lucía de la Catedral Vieja para celebrar el rito de apertura del Año Jubilar Teresiano, como se está haciendo en cada una de las diez sedes de este periodo extraordinario con el que se puede alcanzar la indulgencia plenaria.
En primer lugar, los sacerdotes y el prelado han recorrido el claustro y han salido por la Puerta de Carros hacia la de Santa Lucía a las 18:00 horas. Allí ha dado comienzo el rito de apertura de la puerta jubilar de la Catedral. Como es habitual, se ha leído el evangelio y el secretario-canciller de la Diócesis de Salamanca, Jesús Terradillos, ha leído el decreto pontificio de la penitenciaría apostólica con el que se concede el Año Jubilar.
Para conseguir la indulgencia, los fieles atravesando esta puerta habrán de recurrir con profundidad al sacramento de la reconciliación y comulgar.
En el rito de apertura, el obispo, con su mitra y báculo, ha recordado el salmo 117 ante la llave de la puerta: “Abridme las puertas del triunfo. Y entraré para dar gracias al Señor. Esta es la puerta del Señor. Los vencedores entrarán por ella”.
Cabe destacar que en un lateral del templo (junto al sepulcro del obispo Mauro Rubio) se colocará una imagen de Santa Teresa de Jesús que ha sido cedida para la celebración por las Carmelitas descalzas del Monasterio de San José de Cabrerizos.